El vino es un ser vivo que está en constante evolución, y en Bodegas HPM intentamos estarlo nosotros también. Por eso buscamos siempre ir experimentando y mostrando nuevos vinos que transmitan matices reveladores para acercar a todo tipo de públicos al mundo del vino.

Sin ir más lejos, el tempranillo blanco fue en su día una apuesta de la bodega por hacer algo novedoso y diferente. De hecho, se trata de una variedad autóctona de Rioja que apenas lleva plantándose unos años, a pesar de que su descubrimiento fue en 1992.

Además, a día de hoy, elaboramos vinos a partir de parcelas diferenciadas del resto según nuestros criterios de calidad. Uno de ellos es el vino crianza de la bodega; para su elaboración, Jesús y Luis, conocedores de las mejores uvas para este vino, seleccionaron el viñedo al que llamamos Peñaquemada que tiene más de 40 años de antigüedad, dispuesta en vaso (la plantación de la vid sin ningún tipo de sujeción), a 470m de altitud y en ladera con orientación este-oeste. Lo cual contribuye a la correcta maduración de la uva, dado que se aprovechan las mejores horas de insolación.

Nuestro Amicis también viene de dos parcelas únicas. Su nombre significa “para los amigos” y proviene del latín, y fue un guiño a todos aquellos clientes que para nosotros ya son como amigos. Las uvas se obtienen a partir de un viñedo de más de 100 años de antigüedad, que trae muy poca producción y con racimos muy pequeños que aportan, a nuestro vino emblema, cualidades extraordinarias.

Buscamos que todos nuestros vinos expresen el carácter propio de la uva, por ello somos grandes admiradores y defensores de los vinos monovarietales (elaborados a partir de una sola variedad). Todos nuestros vinos son monovarietales, a excepción de nuestro vino joven maceración carbónica (el cual, tradicionalmente siempre se ha elaborado con un porcentaje de uva blanca, en nuestro caso viura, que le da un frescor y aroma complementario).

“La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando”
Pablo Picasso – Pintor y escultor.